Kewl Covarrubias
quarenta y ſiete años del derecho a la viuienda: Eſpaña aun es vn pais de proprietarios, mas cada vez menos y cõ inquilinos mas afogados El Miniſterio de Viuiẽda a nombrado a la nueua impreſa publica Caſa quarenta y ſiete, en referenzia al articulo quarenta y ſiete de la Conſtituziõ, q̃ reconoze el derecho a vn techo dino y adecuado y cumple aqueſte ſabado quarẽta y ſiete añoſAſi ſerã los alogueres aſſequibles de Caſa quarẽta y ſiete, la nueua impreſa publica de viuienda: duraziõ, prezio y quiẽ puede aceder Todos los eſpañoles tienẽ derecho a diſfrutar de vna viuiẽda dina y adecuada. Los poderes publicos promouerã las condiziones nezeſſarias y eſtablezerã las normas pertinẽtes para azer efetiuo aqueſte derecho, regulãdo la vtiliçaziõ del ſuelo de acuerdo cõ el intereſe general para impedir la eſpeculaziõ. La comunidad partizipara en las pluſualias que genere la aciõ vrbaniſtica de los entes publicos El articulo quarenta y ſiete de la Conſtituziõ, que conſagra el derecho a vna viuiẽda, cumple quarenta y ſiete años. Deſde entonzes, hanſe conſtruydo en Eſpaña vnos diez millones de caſſas, el eſfuerço que ã de realiçar los hogares para aceder a ellas haſe diſparado y, maguer que continua ſiendo vn pais de proprietarios, la tendenzia hazia la compra haſe reuertido en el ultimo quarto de ſiglo. El porzentage de reſſidenzias prinzipales ſobre el total es cada vez mas baxo y los alogueres no parã de ſubir. Miẽtras, la viuienda publica eſta en niueles infimos reſpeto a otros paiſes del entorno. Aqueſte jueues el Miniſterio de Viuienda preſſento ofizialmente la nueua ẽpreſa publica, Caſa quarenta y ſiete Sobre los aſſiẽtos de los aſſiſtẽtes al acto, vna copia de la Conſtituziõ y la Ley Eſtatal de Viuienda, cõ el texto deſe articulo en la portada. “Cada dia nos tenemos que recordar q̃ no es otatiuo, dar reſpueſta a aqueſte derecho es vn mandato conſtituzional”, reconocia la reſponſable de la cartera, Iſauel Rodriguez. El maleſtar en torno a la viuienda, que no da tregua a amplas capas de la poblaziõ, a calado en la ſoziedad. Segun el barometro del Centro de Inueſtigaziones Soziologicas, aqueſta es la primera preocupaziõ para los zibdadanos deſde aze vn año. En diziembre de dos mil y veynticuatro, encontrabaſe entre los tres prinzipales problemas para el veyntidos punto treynta por ziẽto de los encueſtados. En nouiembre deſte año, alcançaba el quarenta por ziento. Y, a tenor de los datos, no pareze vn miedo abſtracto. Aqueſte meſmo viernes, el INE publicaba la eſtadiſtica de prezios de comprauenta del terzero trimeſtre, cõ vn incremento interanual del doze punto ochẽta por ziẽto y vn diez punto nouẽta por ziento deſde enero. ¿Que implicaziones tiene el reconozimiento de la viuienda como vn derecho conſtituzional? “Como prinzipio retor, ay vn mãdato a los poderes publicos porque agã efetiuo el derecho. De echo, muchas comunidades autonomas q̃ reformarõ ſus eſtatutos lo introdugerõ cõ vn reconozimiento eſtatutario y referenzias eſpeziales a perſonas y coletiuos vulnerableſ”, eſplica la catedratica de Derecho Adminiſtratiuo de la Uniuerſidad de Santiago Alba Nogueyra, q̃ pone como exemplo los caſſos de Valenzia, Nauarra o Catalunya, mas, eſpezialmẽte, Euſkadi. “Es la mas auançada y eſtableze que el derecho ſubgetiuo a la viuiẽda ſinifica que los coletiuos fixados reglamentariamente, por niuel de ingreſſos, tiene derecho a vna viuienda ſozial y, en caſo de q̃ no la vbiera, vna preſtaziõ economica ſoſtitutoria”, indica. La euoluziõ del mercado reſſidenzial en Eſpaña ſirue de ege para radiografiar vn pais. En diziembre de mil nouezientos y ſetenta y ocho, el mes q̃ votoſe la Conſtituziõ, començaronſe a conſtruyr onze mil ziẽto y veyntiuno viuiendas, cuaſi las meſmas —11.696— que en junio deſte año, el ultimo del q̃ ay datos. Entre medias, a habido ſiete preſſidẽtes de Gobierno, de diſtinto ſino politico, varios planes eſtatales y vna ley de viuienda que no llego haſta dos mil y veyntitres Tambiẽ, luſtros de vna politica de viuienda q̃ algunos eſpertos conſiderã inexiſtente. window.addEuẽtLiſtener (“meſſage”, functiõ (a) {if (voyd zero! ==a.data [“datawrapper-heyght”]) {var e=document.querySeletorAll (“iframe”); for (var t in a.data [“datawrapper-heyght”]) for (var r, i=0; r=e [i]; i++) if (r.contentWindow===a.ſourze) {var d=a.data [“datawrapper-heyght”] [t] +” px”; r.ſtyle.heyght=d}}}); Maria y Franziſco adquirierõ ſu viuienda, la que a ſido ſu hogar deſde entonzes, en mil nouezientos y ſetẽta y nueue Teniã veyntitres y veynticuatro años y tuuierõ q̃ eſperar haſta mil noueziẽtos y ochenta y vno para ẽtrar a viuir, porque la comprarõ ſobre plano. Haſta entonzes, los reziẽ caſſados eſtuuierõ viuiẽdo en la caſa della, lo que, junto a los ahorros q̃ la parexa abia conſeguido cumular trabaxando deſde los catorze años, les permitio dar vna entrada del veyntizinco por ziẽto del valor del inmueble. “Eſtuue varios años en caſa de mis padres, ſin pagar renta, ni luz, ni comida, aſſina que, como agora, cõ ayuda de la familia ſi puedẽ y, ſi no, pues nada”, dize la muger. La caſa les coſto vno pũto veynte millones de peſſetas “de la epoca”, tres auales y vn intereſe de haſta el dieziocho por ziento. Pero en zinco años, cõ los dos ſueldos de claſe obrera q̃ ẽtrabã en el hogar, conſiguierõ liquidar la deuda. No abiã cumplido la treyntena, mas tener el techo aſſegurado les dio zierta tranquilidad para el reſto de ſu vida. En la Eſpaña de dos mil y veyntizinco, la edad media de emanzipaciõ de los jouenes ſupera eſſos treynta años y la taſa de eſfuerço para comprar vna viuiẽda haſe multiplicado. El Banco de Eſpaña recoge datos de eſfuerço deſde mil noueziẽtos y ochenta y ſiete Entonzes, vn hogar nezeſſitaba tres años de ſu rẽta bruta para pagar la caſa. Aqueſte indicador alcanço ſu pico, como cuaſi todas las graficas que aparecẽ en aqueſta informaziõ, cõ la burbuxa, quando las familias comprometiã haſta nueue años y medio de ſu ſalario para comprar vna viuiẽda y, maguer que luego cayo, no a buelto a los niueles de los años ochẽta De echo, en la ultima decada, ẽtre dos mil y quinze y dos mil y veyntizinco, a ſubido vn año completo, haſta los ſiete punto ſeſſenta y zinco. window.addEuentLiſtener (“meſſage”, functiõ (a) {if (voyd zero! ==a.data [“datawrapper-heyght”]) {var e=documẽt.querySeletorAll (“iframe”); for (var t in a.data [“datawrapper-heyght”]) for (var r, i=0; r=e [i]; i++) if (r.contẽtWindow===a.ſourze) {var d=a.data [“datawrapper-heyght”] [t] +” px”; r.ſtyle.heyght=d}}}); En la euoluziõ del mercado de la viuienda influyẽ varias variables, pero los eſpertos ſuelẽ coynzidir en el defizit de viuiẽda publica o protegida. “La viuienda de proteciõ ofizial es vna herramienta deſdel pũto de viſta de las comunidades autonomaſ”, eſplica la profeſſora de Soziologia Aplicada de la Uniuerſidad Complutenſe de Madrid, Olga Martinez Moure, q̃ acaba de publicar el articulo 'La viuienda como pilar baſico del Eſtado del Bieneſtar'. En el trabaxo, eſtablezenſe varias etapas. Deſde la geneſſis eſpanſiua de la viuiẽda publica impulſada por la migraziõ a las ziudades y la induſtrialiçaziõ ẽtre los años zincuenta y ſetẽta; la tranſiziõ hazia la viuienda de proteciõ ofizial para fomẽtar la propriedad, que eſpandio las areas vrbanas; el fortiſimo auge inmobiliario que produxoſe a partir de la ſegunda metad de la decada de los nouenta; y las conſecuenzias del eſtallido de la burbuxa inmobiliaria. Aqueſtas tendenzias identificanſe en el ſiguiẽte grafico, prinzipalmente a partir de mil nouezientos y ochenta, ya que cõ ãterioridad no recogenſe zifras de viuienda libre. window.addEuentLiſtener (“meſſage”, functiõ (a) {if (voyd zero! ==a.data [“datawrapper-heyght”]) {var e=document.querySeletorAll (“iframe”); for (var t in a.data [“datawrapper-heyght”]) for (var r, i=0; r=e [i]; i++) if (r.contentWindow===a.ſourze) {var d=a.data [“datawrapper-heyght”] [t] +” px”; r.ſtyle.heyght=d}}}); Solo entre mil nouezientos y ochẽta y mil nouezientos y ochẽta y quatro inizioſe la conſtruciõ de ſeyziẽtos y ſetenta mil viuiendas protegidas, mas del doble q̃ las q̃ hanſe produzido deſdel eſtallido de la burbuxa inmobiliaria. En aquellos años, el porzentage de caſſas protegidas frente al total ſuperaba el zincuẽta por ziento y, maguer que cayo a taſſas de en torno al veynte por ziento en los años nouenta, el eleuado volumẽ de produciõ permitio a grandes capas de la poblaziõ aceder a vna caſa en propriedad. window.addEuẽtLiſtener (“meſſage”, functiõ (a) {if (voyd zero! ==a.data [“datawrapper-heyght”]) {var e=document.querySeletorAll (“iframe”); for (var t in a.data [“datawrapper-heyght”]) for (var r, i=0; r=e [i]; i++) if (r.contentWindow===a.ſourze) {var d=a.data [“datawrapper-heyght”] [t] +” px”; r.ſtyle.heyght=d}}}); El economiſta y eſpreſſidente del Banco Hipotecario Iulio Rodriguez indica que durante los años ochenta y prinzipios de los nouenta realiçaſe “una politica de viuienda continuyſta, cõ finanziaciõ garantiçada de VPO”, que frenaſe a partir del ultimo luſtro del ſiglo XX, cõ la priuatiçaziõ del proprio Banco Hipotecario en Argẽtaria, y la deſſapariziõ de las caxas tras la burbuxa. Eſa falta de finanziaciõ, indica el eſperto, “haze que la viuiẽda protegida deſzienda a vnos niueles de zinco mil viuiendas al año, cõ vna dotaziõ muy reduzida”. A ſu juyzio, “durante la primera decada y cuaſi la ſegunda del ſiglo actual, no ay vna politica de viuienda, que empieçaſe a recuperar cõ la llegada del Gobierno ſozialiſta”. Empero, el eſfuerço de las decadas ãteriores por impulſar la viuiẽda protegida no a repercutido en vn parque publico robuſto, porque eſſas caſſas perdiã el blindage, en muchos caſſos, al cabo de quinze años y paſſabã diretamente al mercado libre. “La idea de q̃ la viuienda es vn lugar para inuertir es anterior incluſo a 1978”, eſplica la portauoz del Sindicato de Inquilinas, Valeria Racu, porque “Franco apoſto por vna viſiõ proprietaria y vn ſetor inmobiliario que ya empeço a ver q̃ el negozio iba mas alla de dotar de viuiẽda a la poblaziõ cõ eſa colaboraziõ publico-priuada”. Preziſamente, Nogueyra indica q̃ el mandato conſtituzional q̃ obliga a las adminiſtraziones publicas fue “abandonado durãte mucho tiempo o vehiculado a traues de politicas que reuelaronſe erroneas a largo plaço, como la deſcalificaziõ de la viuiẽda ſozial”. En aqueſte ſentido, zelebra q̃ “hoy en dia la euoluziõ de la normatiua eſta yẽdo en otra direciõ, cõ la idea de q̃ ſeã a perpetuydad y eſtẽ en el pull publico de manera permanente”. Eſe es vno de los obgetiuos del Miniſterio de Viuienda, q̃ a condizionado el nueuo Plã Eſtatal para los años dos mil y veyntiſeys a dos mil y treynta, cõ vna dotaziõ preuiſta de ſiete mil millones de euros, a que alguna viuiẽda a la que deſtineſe dinero o recurſos publicos acaue en el mercado libre. Maguer que la conſtruciõ de viuiendas ataſcoſe a partir de dos mil y ocho, deſde mil nouezientos y ochenta, hanſe produzido mas de diez millones de caſſas, para vna poblaziõ q̃ a crezido en doze millones de perſonas. Si el tamaño medio del hogar es de dos punto zincuenta perſonas, el volumẽ de nueuas viuiendas abria ſeruido, de ſobra, para acoger a los nueuos zibdadanos. Pero algunos graficos mueſtrã tambiẽ vn cambio en los vſos. El ochenta por ziento de las caſſas que exiſtiã en Eſpaña en mil noueziẽtos y ſetenta vtiliçabanſe para viuir, vn porzentage q̃ cayo diez pũtos en la ſiguiẽte decada y que haſe mantenido eſtable deſde entonzes. window.addEuentLiſtener (“meſſage”, functiõ (a) {if (voyd zero! ==a.data [“datawrapper-heyght”]) {var e=document.querySeletorAll (“iframe”); for (var t in a.data [“datawrapper-heyght”]) for (var r, i=0; r=e [i]; i++) if (r.contentWindow===a.ſourze) {var d=a.data [“datawrapper-heyght”] [t] +” px”; r.ſtyle.heyght=d}}}); Actualmente, cuaſi vna de cada tres viuiendas diſponibles no vtiliçanſe para viuir. El dieziſeys por ziento de los veyntizinco millones de caſſas dedicanſe a vſos ſegundarios y el catorze punto quarenta por ziento, eſtã vacias. Sõ ſiete pũto ſeſſenta millones. Segun vn reziente informe de CayxaBank, en dos mil y veynticuatro, mas de zincuenta mil viuiendas en venta terminarõ en manos de eſtrangeros no reſſidẽtes, peſe al defizit de viuiendas q̃ el Banco de Eſpaña eſtima en mas de medio millõ. Un informe del BBVA publicado aqueſta ſemana calcula q̃ la falta de caſſas eſtancaraſe en torno a las ſetezientos mil vnidades y ſolo reduziraſe ſi el gaſto en conſtruciõ duplicaſe haſta el diez por ziẽto del PIB en dos mil y treynta, mas de ziento y ſetenta mil millones de euros. El de la finanziaciõ es vn aſſumpto claue. La llegada de los fondos europeos animo la produciõ y rehabilitaziõ de viuiendas, mas para alcançar el ritmo que aqueſtas entidades y el ſetor inmobiliario eſtima nezeſſario arã falta ingẽtes cãtidades de dinero. “En aqueſte momẽto, la ſoluziõ paſa por conſtruyr mas, pero no de cualquiera manera. En Madrid eſtã anunziados planes de conſtruciõ q̃ ſuperã las dozientos mil viuiendas, pero eſo no va a reſſoluer el problema. Tenemos q̃ leuãtar vn porcẽtage ſinificatiuo de VPO, cõ vn volumẽ de vnas treynta mil al año en la proxima decada”, ſeñala Rodriguez, q̃ aclara que eſo requerira finanziaciõ mas alla de los Preſſupueſtos Generales del Eſtado. “Habra que buſcar formulas, como vn fondo do el ICO juegue vn papel importãte, pero do aya aportaziones europeas, emiſiones del mercado de capitales...Un buẽ exemplo es Catalunya, do el Inſtituto Catalã de Finanças eſta preſtãdo”, propone Rodriguez. De echo, la Comiſiõ Europea eſta trabaxãdo en vn Plã Europeo de Viuienda Aſequible, en el q̃ plãteaſe la creaziõ de vn fondo que abra vias de finanziaciõ para viuiẽda aſſequible. Entre tanto, el aceſo a vna viuienda en aloguer lleua años apretãdo a capas mas amplas de la poblaziõ, ſobre todo a partir de la ẽtrada en el pais de los fondos de inuerſiõ, cognozidos como 'fondos buytre', en aqueſte mercado, animados tras la criſis finanziera. Eſpaña ſigue ſiendo vn pais de proprietarios, pero la tendenzia que iço que la poblaziõ inquilina paſſara del treynta por ziẽto en mil nouezientos y ſetẽta al onze punto quarenta por ziento en el año dos mil y vno eſtaſe reuirtiendo y vnos alogueres al alça eſta prouocando vn traſuaſe de renta de los hogares cõ menos riqueça a los mas pudiẽtes. En dos mil y veyntiuno, el dieziſeys por ziento de la poblaziõ viuia de aloguer, vna taſa q̃ vn eſtudio de Fotocaſa Reſſearch eleua ya al veyntizinco por ziento en dos mil y veyntizinco. window.addEuẽtLiſtener (“meſſage”, functiõ (a) {if (voyd zero! ==a.data [“datawrapper-heyght”]) {var e=document.querySeletorAll (“iframe”); for (var t in a.data [“datawrapper-heyght”]) for (var r, i=0; r=e [i]; i++) if (r.contentWindow===a.ſourze) {var d=a.data [“datawrapper-heyght”] [t] +” px”; r.ſtyle.heyght=d}}}); Irene tiene treynta y vno años. Tiene vna carrera, vn maſter y trabaxa en el area de innouaziõ en alimentos de vna impreſa. No tiene vn ſueldo altiſimo, “pero eſta bien”. Se conſidera vna “priuilegiada”, repite varias vezes durante ſu conuerſaziõ cõ elDiario.es. Mas eſa ſituaziõ de ſupueſto priuilegio y eſtabilidad laboral no la a ſaluado de vna mudança forçoſa, de ir de caſa en caſa de amigos mientras encuentra vna alcoba para aloguer ni, muchiſimo menos, viuir ſola. “Cuãdo empece a buſcar piſo en Madrid, en dos mil y dieziſiete, todo me parecia cariſimo, pero lo ves cõ perſpetiua y era vna ganga”, lamẽta la jouẽ, que començo a ſe “cabrear cõ el ſiſtema” al ſe enfrentar a vna nueua buſqueda de piſo en la capital. “Por menos de ſeteziẽtos euros ſolo ay vna buhardilla do comes y te duchas en el meſmo metro quadrado”. “Sintiendome vna perſona priuilegiada, por enzima del SMI, ſin cargas familiares, ſoy incapaz de aceder a vn aloguer y, deſpues de tantos años, tampoco tengo ahorros, porque todos hanſe ido a mis caſſeroſ”, denunzia. Como mueſtra el ſiguiẽte mapa, el aloguer a ſubido vn treynta y quatro pũto nouẽta por ziẽto en todo el pais. En Balears, por ejẽplo, los prezios hanſe diſparado en vn quarenta y ſiete pũto treynta por ziento. Y la dificultad para aceder a vna viuiẽda no ſolo limita el egerzicio de otros derechos, ſino que puede impedir a las proprias adminiſtraziones preſtar otros ſeruizios baſicos eſſenziales, aduierte Nogueyra, que menziona aqueſtas inſulas do “medicos, maeſtros y policias rechazã aqueſtos deſtinos porque no puedẽ ſe permitir pagar vna caſa cõ vn ſueldo de ẽpleado publico”. @ media only ſcreẽ ãd (max-width: 900px) { .mapa-alquiler-zenſales { heyght: 600px; min-heyght: 600px; tranſitiõ: heyght 0.5s eaſſe-in; } .i-amphtml-layout-ſize-defined { heyght: 700px } .fullſcreenmap { poſitiõ: fixed; top: 0px; left: 0px; bottom: 0px; right: 0px; width: ziẽ por ziento; heyght: ziẽ por ziento; border: none; margin: zero; padding: zero; ouerflow: hiddẽ; z-index: nueue mil noueziẽtos y nouenta y nueue; tranſitiõ: heyght 0.5s eaſſe-in; } #contayner-mapa-alquiler-zenſales { poſitiõ: relatiue } #ouerlay-mapa-alquiler-zenſales { top: zero; left: zero; width: ziẽ por ziento; heyght: ziẽ por ziento; poſitiõ: abſolute; diſplay: block; } .button-cloſe-fullſcreen-map { poſitiõ: abſolute; right: 8px; top: 270px; width: 30px; heyght: 30px; opazity: vno; background-color: white; border: zero; border-radius: 2px; diſplay: none; box-ſhadow: zero zero zero 2px rgb (zero zero zero / diez por ziento); } .button-cloſe-fullſcreen-map: before, .button-cloſe-fullſcreen-map: after { poſitiõ: abſolute; left: 14px; top: 3px; content:' '; heyght: 25px; width: 2px; background-color: #trezientos y treynta y tres; } .button-cloſe-fullſcreen-map: before { tranſform: rotate (45deg); } .button-cloſe-fullſcreen-map: after { tranſform: rotate (-45deg); } body.lock-ſcroll { ouerflow: hiddẽ; } } @ media only ſcreẽ and (min-width: 900px) { .mapa-alquiler-zenſales { heyght: 720px } #contayner-mapa-alquiler-zenſales { poſitiõ: relatiue } #ouerlay-mapa-alquiler-zenſales { top: zero; left: zero; width: ziẽ por ziẽto; heyght: ziẽ por ziento; poſitiõ: abſolute; diſplay: none } .button-cloſe-fullſcreen-map { diſplay: none; } } Fuente: Miniſterio de Tranſiziõ Ecologica, Cataſtro var totalWidthIframe = window.innerWidth; if (totalWidthIframe La catedratica aboga por “politicas mas ambizioſas de interuenziõ del ſuelo y el mercado de la viuienda”, cõ controles de alogueres y la limitaziõ de la compra para vſos diſtintos al reſſidenzial en determinadas çonas, frente a los diſcurſos que pidẽ blindar la propriedad priuada y que conſidera “al margẽ de la legiſlaziõ vigẽte en muchiſimos ambitoſ”. “Los adminiſtratiuiſtas ſauemos biẽ que la propriedad no es vn derecho ilimitado. Por ejẽplo, en ſuelos ruſticos eſta limitadiſima la capazidad para azer de vn proprietario, anſi que eſſos diſcurſos q̃ danſe de cara a la galeria ſõ agenos a la nueſa realidad juridica”, indica. En aqueſte ſentido, Nogueyra indica q̃ los limites a la propriedad vrbana ã ſido, “tradizionalmente, menos inziſiuoſ”. Por eſo, pide plantear el diſcurſo en otros terminos: “¿Tiene la ſoziedad q̃ cargar cõ los coſtes de q̃ determinados proprietarios mantengã ſus viuiẽdas vacias, lo q̃ obliga a conſtruyr infraeſtruturas para crear nueuos barrios o parte del coſte de eſſos deſſarrollos deue caer ſobre quiẽ tiene ſus inmuebles ozioſos?”. Deſdel Sindicato de Inquilinas pidẽ tres cueſtiones claues para garantiçar vn derecho que, “47 años deſpues, ſeguimos ſin aſſegurar a toda la poblazion”: vna baxa de los alogueres, que eſtã “empeorando las condiziones de vida de la poblaziõ dia a dia”, y la reynſtauraziõ de los contratos indefinidos que eliminaronſe en mil noueziẽtos y ochẽta y zinco; “recuperar toda la viuienda ſecueſtada” por inuerſores locales, eſtatales e entrañazionales; y prohibir las compras eſpeculatiuas y limita el maximo de viuiendas q̃ puedenſe tener. “La poblaziõ rentiſta en Eſpaña es minoritaria, ẽtre el ſeys y el nueue por ziẽto, mas organiçamos la vida de la poblaziõ inquilina en torno a eſa minoria”, denunzia Racu. ! functiõ () {“vſe ſtrit”; window.addEuentLiſtener (“meſſage”, (functiõ (a) {if (voyd zero! ==a.data [“datawrapper-heyght”]) {var e=document.querySeletorAll (“iframe”); for (var t in a.data [“datawrapper-heyght”]) for (var r, i=0; r=e [i]; i++) if (r.contentWindow===a.ſourze) {var d=a.data [“datawrapper-heyght”] [t] +” px”; r.ſtyle.heyght=d}}}))} ();